El pasado 28 de enero se presento el nuevo monoplaza de Ferrari con el que Alonso intentara conseguir su tercer campeonato del mundo de Formula1. El coche tiene varios cambios con respecto al del año anterior que no vamos a explicar ya que lo que nos interesa es el nombre. La empresa lo denomino F150 como homenaje a los 150 años que se cumplen de la unificación de Italia y lleva de forma destacada en la carrocería los colores de la bandera italiana.
Bueno, pues el nombre del monoplaza no les ha durado ni 15 días ya que Ford demandó a la empresa italiana por el uso de la sigla F150, que la marca estadounidense hizo famosa con sus camionetas. En la queja presentada ante el tribunal del distrito de Detroit Ford afirma “Ferrari se ha apropiado indebidamente de la marca registrada F-150 al llamar a su nuevo coche de carreras F150 para capitalizar y beneficiarse del renombre consustancial que Ford ha conseguido en la marca F-150”.
Ford perseguía prohibir a Ferrari el uso del nombre, reclamar daños y también acusar a la marca italiana de “cybersquartting”, es decir, apropiarse en internet de un dominio que corresponde a una marca comercial registrada, por crear la página www.ferrarif150.com.
Ayer conocíamos el desenlace de esta historia y el resultado es que Ferrari ha cambiado el nombre por el de F150th Italia, manteniendo la línea conmemorativa.
Y después de esto me pregunto dos cosas,
1) ¿Seguro que Ferrari se beneficia del renombre de la sigla (¿Ferrari y Ford se hacen la competencia?)? y
2) ¿A nadie de Ferrari se le ocurrió por lo menos buscar en Google “F150” para saber si existía?
