En la antigua Pompeya se caen las paredes. En Milán, la famosa Scala no puede ni siquiera pagar a sus trabajadores. En Italia, muchos viejos edificios y auténticos iconos de la cultura se desmoronan. Los masivos recortes culturales aplicados por el gobierno de Berlusconi los ha dejado tocados de muerte. Sin embargo, han encontrado una tabla de salvación. En el país transalpino, las firmas de moda están apostando fuerte por el patrocinio cultural. Un ejemplo de ello es la marca de calzados Tod’s, que ha invertido 25 millones de dólares en la conservación de famoso Coliseo romano. A cambio, la compañía tendrá los derechos para la comercialización en exclusiva de uno de los monumentos más simbólicos de Roma.
Tod’s no es la única firma que se ha implicado en la salvación de la enorme herencia cultural de Italia. También las casas de moda Prada y Replay han invertido dinero para el mantenimiento de los suntuosos palacios venecianos.
“Las firmas de moda tiene mayor sensibilidad por la su imagen de marca que otras empresas”, explica Eugenio Bona, presidente de Media Italia, en declaraciones a W&V. No obstante, “es necesario que todos comprendamos que las cultura es un recurso para nuestro país. El interés de los turistas extranjeros, pero también de los italianos, por los museos, las exposiciones y los eventos culturales es muy elevado. En el futuro, todo esto puede ser nuestro capital”, añade.